Carolina grita "oh dios, oh dios... ...oh Dios! M-m-maestro-no puedo! Por favor, cógeme. ...por favor, por favor, amo!" Le miro a la cara y está de rodillas con el labio hinchado y una mirada tímida, me paro ahí y lo asimilo todo... . la hermosa cara, los pechos rebotando y tensándose contra su piel, su lindo cuerpecito ahora balanceándose mientras Carolina gime fuertemente y lucha por empujar mi polla más profundamente. Mis ojos están fijos en ella y no puedo evitar mirarla a los ojos. Ella me agarra la polla como si fuera a meterla más profundamente dentro de ella y Carolina sigue haciendo ese dulce y pequeño sonido suplicante. No sé por cuánto tiempo sigo mirándola a los ojos y por un lado quiero mostrarle lo que veo como algo increíble. ...bestia voraz, no puedo evitar poner los ojos en blanco cuando escucho su apagado "cógeme", mientras Carolina finalmente me empuja a entrar. Se ha vuelto loca, abrazando el lado del mostrador y mordiéndose el labio. Empiezo a mover mi polla de arriba a abajo con mi mano libre en el borde superior frotando mi punta contra su clítoris, haciendo que grite y cierre los ojos. Carolina realmente tiene un clítoris muy pequeño... . su cuerpo empieza a tener espasmos y mi polla la estira. .
