Ella respondió a sus besos y a sus dedos, pero al principio pensó que era sólo un lento beso de arriba a abajo donde Lustforlola se revolvió y luego le dio un descarado "no gracias" o algo así. Finalmente, le hizo olvidar las bragas por un segundo cuando dejó de quitárselas y se puso tan caliente y duro que no pudo pensar en nada más y bajó sus manos y las movió entre sus piernas. Se dio cuenta de que sus pantalones no se quitaban hasta que Lustforlola le tocó el coño. Aún así quería protegerla de que él se molestara porque sus bragas no se salían, así que no se las quitó hasta después de que Lustforlola le pusiera el coño en la lengua. Trató de convencerla de que lo besara de nuevo, pero era difícil y necesitaba concentrarse en su coño y no al revés. Lustforlola no ayudaba mucho al no bajar a la cama y meterle la polla en la boca. Lustforlola también estaba sobre él, y pronto sus pies estaban sobre la cama. Lustforlola se bajó los calzones hasta los tobillos y simuló tomar una ducha y luego se acostó de espaldas con las piernas juntas, mostrándole su coño y culo bronceados. No se le da bien fingir que se ducha y de repente sintió que el eje duro le presionaba la vagina, así que Lustforlola separó las piernas e inmediatamente puso una almohada debajo del culo para sentir el interior de su coño. Se sintió fantástico, pero Lustforlola no quiso quitarse las bragas. Se las puso en esa posición, también como una loción corporal, que Lustforlola le dijo a los chicos que la trajeran más tarde en la noche...
