Annybeiker disfrutó el sabor de mi semen. La sensación fue increíble. No puedo esperar a sentirlo de nuevo. Annybeiker y Tony volaron hacia mí y se acostaron juntos en mi cama. Cada uno tenía sus manos llenas con mi cuerpo, y sin decir una palabra Annybeiker me levantó la cabeza y me besó. Luego me dijo, "no puedes cogerme de otra manera", y con eso Annybeiker se puso encima de mí y me acurrucé con ella. Me desperté en la cama al día siguiente con Annybeiker apoyándome en sus rodillas. Podía sentir a Annybeiker pellizcándome los pezones. Eran muy sensibles. Annybeiker me dijo: "Me encantó darle a esa enorme polla tuya la mamada que te mereces". Tenías toda mi atención, y quería que lo supieras. Annybeiker agarró un sostén deportivo y lo puso sobre mi cabeza. Luego me susurró: "Si quieres volver a follarme, tienes que dejar que Annybeiker te folle". Es mío, ¿recuerdas?" Annybeiker cerró la puerta y dijo: "Sé que no le gusta que los hombres se acuesten con chicos, pero es tu cuerpo. Sal ahí fuera y folla con todos los que quieras y me encantará tenerte de vuelta. Annybeiker se dio cuenta de que no tenía puestas las bragas. Ahora veo que estaba nerviosa por si quería hacerle una mamada a Annybeiker. Annybeiker dijo, "No me vas a permitir que me folle a mi propio hermano, ¿verdad?" Le dije: "Sí, lo haremos de la manera correcta". Quiero follarte, así que mejor que creas que te dejaré follarme a mí también. .