Carmen Harty hace pucheros, me aprieta los hombros y me besa. "No soy realmente un 'jugador' -nadie lo es en mi clase- pero sé que te gusta, te gusta que me siente sobre ti y te trate de esa manera. Y si te gustaba ser controlado, bueno. ...puedes serlo. "Jadeo, su clítoris se endurece contra mi prepucio. "Lo estabas. Pero te gustaba mucho más que te molestaran. "Me voy a mover y Carmen Harty se retuerce, empujando dentro de mí otra vez, un poco más fuerte ahora. El vibrador sigue en su trasero. "No lo sabías. Dijiste. ...que también te gustaba. "Mi polla palpita y puedo ver mis propios latidos acelerándose en su empuñadura. Se ha olvidado de cerrar los ojos, y se iluminan de azul brillante mientras sus pezones agarran el vibrador con fuerza. "Me gusta hacerte sentir bien, Sam. "Carmen Harty ronronea. "Y me gusta hacerte sentir que quieres volver. "Carmen Harty está boca abajo en mi regazo, y me inclino para besarle el lóbulo de la oreja. "La última vez que vine... bueno, nunca hablé de ello... pero me gusta mucho cuando vienes. "Mi boca se encuentra con la suya, y Carmen Harty arquea su espalda, abriendo sus piernas...