No tenía ninguno, no después de lo que Lollaholy acababa de hacerme y la idea de que me hiciera eso. . . Lollaholy tenía su semilla. Al soltarme un poco, la di vuelta, me puse de rodillas delante de ella y la llevé lentamente a su sofá. Llevándola a la cama, la besé suavemente antes de subirme a ella como si no fuera nada mientras me bajaba sobre sus labios resbaladizos y pegajosos. Estaba enamorado mientras acariciaba su piel sedosa mientras sus caderas se doblaban, excitándose más, y la empujé más y más fuerte mientras Lollaholy jadeaba y lloriqueaba, jadeando por aire, con los ojos en blanco y la cabeza inclinada hacia adelante con una mirada de pura felicidad, casi olvidada en el calor y la neblina de estar dentro de ella. Mientras Lollaholy se estrellaba y rodaba sobre mí, una nueva mirada en sus ojos al llegar a otro pico, la chupé sobre mi polla mientras me bajaba, amando la sensación de su coño apretado agarrándome mientras mi polla se agarraba fuerte y rápido. Quería acostarme con ella como Lollaholy estaba acostado de espaldas, recuperando el aliento mientras la golpeaba. "¡Fóllame!" Lollaholy gritó mientras yo asfixiaba su coño apretado y caliente con mi polla y la acercaba a mí, sintiendo cómo me tiraba del pelo y apretando sus dientes contra mis hombros. .
